EL COSTO DE LA VERDAD

¿La verdad?

¿Mi verdad?

Y si es el camino correcto, ¿también sería justo hablar de tu verdad?

Todos los que buscamos verdades nos hemos casado con ideas que han dado rumbo a nuestro camino. Sin embargo, el golpe del tiempo siempre pone a prueba las columnas que soportan nuestra realidad, llevándonos a reestructurar nuestro templo, ya sea para modificar aquellas ideas que simplemente han caducado, o reafirmar las que al día de hoy son funcionales.

En cualquiera de los casos, la "Verdad" siempre cambia de acuerdo a nuestras estructuras de pensamiento, y en este sentido, es importante aclarar que aquellas ideas que nos hacen evolucionar no siempre son las funcionales, en realidad las ideas y formas de actuar que nos envuelven en crisis son justo las que nos enseñan el camino a seguir. Sabes que algo anda mal con el refrigerador cuando la comida empieza a podrirse al corto tiempo.

Una crisis se da cuando algunos valores que eran punto de partida han dejado de serlo, que algunos axiomas que eran referentes ya no lo son mas, y que algunas reglas del juego que antes funcionaban hoy ya cambiaron. En este momento no hay manera de seguir haciendo las mismas jugadas y esperar los antiguos resultados, aunque me cierre a mis ideas, ya que las fichas son otras, ya no es lo que antes era, es más, ya no somos los mismos que iniciamos esta lectura.

Es necesario que este cambio del entorno se traslade a nuestro interior, a la manera en que se analizan las situaciones y nos situamos de frente a los problemas sin mascaras, cuestionarnos la forma en que al día de hoy se han toman acciones. Se requiere creatividad y valentía, para dejar de repetir los mismos pasos, significa que quizás, se tenga que hacer las cosas de una manera diferente para obtener el resultado deseado.

En un estado de crisis es común escuchar lamentos y decepciones. Se suele pensar que lo que nos pasa es lo peor, es posible que lo vivamos así ya que el ser humano basa su evolución en la competencia. Competimos contra la atmósfera para respirar, contra las enfermedades, en llevar alimento a la mesa, por un techo digno, en tener lo mejor, en vivir lo mejor, naturalmente, también competimos en mostrar que nuestras ideas son las correctas y si no lo logramos, entonces aveces se suele competir en desprestigiar los logros ajenos, competimos en que lo que nos pasa es lo peor, mostramos nuestras cicatrices para que se den cuenta que son mas profundas que la de los demás, seguramente esa es una parte de la naturaleza humana.

Lo que más importa en esta historia, es saber que la queja no resuelve nada, la queja solo sirve para darle salida a una tensión incomoda de las cosas que no son, sin embargo la queja en sí no resuelve nada. La revisión histórica de los casos pueden darnos cierta luz, es cierto, pero tampoco resuelve nada, lo que tiene de bueno y malo el pasado es precisamente eso, “ya pasó”. Por eso mismo sostengo, que ni la historia ni la queja resuelven las cosas. En última instancia lo que sí se resuelve es la acción. Una crisis no es un problema hasta que nos deja inactivos, y justo en ese momento, sí es un problema.

Para enfrentar una crisis lo que hace falta es animarnos a encarar los cambios que se presentan día a día. Animarnos a tomar nota de otros, darnos cuenta de cómo otros si han logrado metas, y no tomar de otros para aplicar la misma formula, no. Tomar ejemplo para desarrollar nuestras propias formulas, así tu fracaso será solo tuyo y en consecuencia el acierto de igual manera, así nunca haremos responsable a nadie de nuestros errores y jamas nadie podrá robarnos nuestro éxito. Aprender de nuestros propios fracasos siempre será lo más importante, quiero decir que nunca se aprende del acierto, solo el error lleva a la evolución de las ideas en búsqueda de Verdades, y me parece que esta es una regla para todos en cualquier momento.

Si en mis manos estuviera un colegio, fomentaría el error y no los éxitos. Los éxitos en realidad no conducen a ningún lado y los fracasos bien capitalizados serán el futuro de tu verdad.

“Confía mucho en dios pero ata tu mismo tu camello" Refrán Sufi

Ante una crisis el optimismo es importante, mas no como creo que el común de las personas lo entiende. Los Sufis tienen un refrán que los acompaña desde hace muchos años: “Confía mucho en dios pero ata tu mismo tu camello”, otra frase que tengo presente es: Las Vacas no dan Leche, me parece buena la parte de confía y deja que suceda, de saber que el recurso esta justo esperándonos, pero alcanzar una verdad va a la par de accionar para que las cosas sucedan. Para mí el concepto de optimista es creer que hay cosas por hacer y que hay que hacerlas.

"Las Vacas no dan Leche" Frase coloquial.

Una buena parte de buscar la Verdad es considerar que una crisis es una lupa de aumento donde resalta de inmediato todo lo que no ha funcionado, pasa así en los países, en sus economías y de igual manera en el micro mundo. Por ejemplo, si tengo una empresa donde le voy poniendo parches para solucionar las cosas puede ser que no se note, pero al entrar en acción de inmediato salta a la vista los errores. Si yo tengo una situación de pareja endeble en un entorno de familia complicado, y me hago el tonto viendo para otros lados, cuando llego a casa estos problemas emergen y se multiplican. No porque los haya traído la crisis, la crisis, el problema siempre estuvo allí, la crisis solo evidencia una verdad, ha mostrado lo que no quise o no pude ver, pero jamás una crisis causa los problemas. Si yo tengo una deficiencia en mi autoestima, no es la crisis quién lo causa, en todo caso, es la crisis la que lo destapa. Querer pensar qué es suerte, o la envidia de los demás, es una manera de des responsabilizarnos de nuestro actuar, y eso, jamas conduce al ser en búsqueda de su verdad, lo adormece, lo mutila, lo aísla.

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El Ratón se pregunta ¿ahora qué va a pasar?, mientras el León se cuestiona ¿ahora que voy a hacer? Fernando Zavater

Siguiendo las enseñanzas del maestro Fernando Zavater, nos plantea que ante las crisis hay dos posturas, la del ratón que se cuestiona: ¿ahora qué va a pasar?, y la del león que pregunta ¿ahora que voy a hacer? La postura es la forma en cómo actuaremos. No olvidemos que un componente que la crisis nos muestra es el miedo, nos da miedo el cambio, el perder poder, el vernos vulnerables, el sentirnos cuestionados, y por ende, nos paralizamos en nuestras viejas costumbres, buscamos la protección de la cueva sin salida buscando en el fondo por donde escapar, sin darnos cuenta que la única salida es por donde entramos. Que esos miedos, ese rigor de ideas nos metieron en esta crisis.

En cada situación de crisis siempre están presentes dos cosas, el peligro y la oportunidad. Peligro de desaparecer sucumbiendo ante mis viejas ideas (aunque las defienda a capa y espada), u oportunidad de crecer y vencerme a mí mismo.

La palabra crisis viene de la raíz “criptos” que significa decisión, así que podemos definir que una situación de crisis es un momento de cambio en realidad, que implica una pausa para modificar, que es una oportunidad para evolucionar ya que está presente más que nunca el riesgo de ahogarse, y eso solo dependerá de nuestra decisión.

No hay que engañarnos, podemos pasar por una situación que nos parezca que el 99% de lo que sucedió es del exterior y el 1% es nuestro, o viceversa, pero lo que jamás pasara es que todo sea responsabilidad del otro o mío. Así que como siempre hay algo nuestro la decisión es sencilla, consiste simplemente en tomar nuestro cincel y martillo para cambiar con fuerza de voluntad y correcto enfoque ese 1% o el gran 99% que si me corresponde.

El buen humor ante una situación de cambio es importante, aunque no creo que a todos les funcione, hay personas que simplemente no se les da el estar de buenas, lo que sí sé es que a estas personas si les va peor. Sería extenso hablar de los efectos medicinales y curativos de las endorfinas que la risa genera, esto está perfectamente bien documentado y demostrado, y no es cosa breve. Quedémonos con el poder que adquiere aquella persona capaz de reírse de sus problemas. ¿Y cómo se logra? Mi maestro Carlos solía decirme... Hazlo, solo hazlo, es el único camino valido en búsqueda de cualquier verdad, enfrenta, realiza, pon a prueba y si fallas, párate, sacúdete y hazlo una vez mas, con nuevas formulas, con un aprendizaje, atrévete a hundirte en tu ignorancia, aceptarla y evoluciona.

Recordemos, hay que trabajar y caminar para pasar por una crisis. Me refiero a caminar y pasar, ya que las crisis no se resuelven como antes lo menciono, una crisis se resolvería si fuera un problema, la crisis no lo es, solo muestra los verdaderos problemas.

La verdad, mi verdad o nuestra verdad, siempre estará condicionada a la forma de pensar, expandir la conciencia siempre nos llevará a vivir crisis, aunque a veces sean imperceptibles.

Me despido con un ultimo mensaje, cuando estés en crisis da gracias, esto significa que estas en un camino de evolución, con golpes, con cicatrices, cicatrices que son recuerdos de que el pasado si existió, y que dan testimonio de que, por lo menos, la anterior crisis te ha fortalecido.